de Vasos y Aguas y Vacíos...
Las relaciones entre las personas podrían compararse a un vaso de agua. El otro es el vaso y uno es el agua:
Uno puede llenar el vaso hasta el tope con su agua, eso significaría hacer al otro feliz (llenarlo, hacerlo sentir no vacío).
A veces uno puede colmar el vaso y hacer que rebalse: ahí sería cuando hartamos al otro ("la gota que colmó el vaso").
Y uno a veces puede dar un poco de agua, sólo un poco por no querer que el vaso rebalse, y hacer sentir al otro incompleto.
O uno puede verter su agua con tal fuerza que el vaso pierde estabilidad, se tambalea y cae. Y se rompe.
O uno puede no aportar ni una gota de agua a ese vaso vacío. O quizás cuando encuentra ese vaso, ya está lleno con otro agua.
Uno puede llenar el vaso hasta el tope con su agua, eso significaría hacer al otro feliz (llenarlo, hacerlo sentir no vacío).
A veces uno puede colmar el vaso y hacer que rebalse: ahí sería cuando hartamos al otro ("la gota que colmó el vaso").
Y uno a veces puede dar un poco de agua, sólo un poco por no querer que el vaso rebalse, y hacer sentir al otro incompleto.
O uno puede verter su agua con tal fuerza que el vaso pierde estabilidad, se tambalea y cae. Y se rompe.
O uno puede no aportar ni una gota de agua a ese vaso vacío. O quizás cuando encuentra ese vaso, ya está lleno con otro agua.