Crónicas de mis andanzas I

El sábado pasado estuve en el estadio Obras, porque tocaba una banda que seguimos con un amigo mío: Estelares (la banda, no mi amigo).
Era un "festival" o algo así llamado "Nuevo Rock" (Estelares ya había participado en otro, "Nuevo Pop", porque hacen... sí, adivinaste, pop-rock). Ya cuando llegamos, en la puerta había mucha de esa gente que no soporto: alternatontos y qué sé yo. Muchas muchas niñas vestidas de rosa, casi como una plaga diría yo. Mucho brillo pero poco glamour a mi gusto.
En fin, entramos, poca gente por suerte (me voy poniendo vieja me parece), de nuevo muchas camperitas y remeritas y mochilitas y polleritas rosas... qué color feo.
Sonó Baobab, lindo. Sonó Volador G, potente. Y, por fin, sonó Estelares. Yo no sé si es porque me encanta la banda o qué, pero el show fue prolijo, lo único que puedo criticarle es el hecho de que sólo hicieran temas de su último disco (Ardimos) y ninguno de Extraño Lugar, o Amantes Suicidas. Fue un show corto, por lo que quedaron afuera temas como "La Coupé Roja" y el cover de "Pronta Entrega" de Virus (que lo hacen genialmente), pero sonó "Feliz", que es un temazo.
Subió Mariano Martínez de Attaque 77 a tocar la guitarra electroacústica en un par de temas (creo que "América" y no me acuerdo cuál otro). Aplausos.
Y se fueron, no más... para que suba al escenario Emmanuel Horvilleur (quien bailó al mejor estilo Jay Kay de Jamiroquai), y como estaba aburrido, nos fuimos. Total, sólo íbamos a perdernos a Turf, porque Juana La Loca no iba a presentarse "por razones ajenas a la organización"...
Así que salimos, pancho con papitas y unas salsas en un quiosquito de enfrente mientras pasaban una peli de Stallone (ojalá hubiera sido Rocky, pero no)...
Y se me fue otro sábado.